1Sam 17a El hijo enviado del padre

Categoría de nivel principal o raíz: Antiguo Testamento
posted by: F Fournier

1 Samuel 17 El hijo enviado del padre

Léase por favor 1 Samuel 17

 

Podemos decir que este capítulo es el capítulo más conocido aun entre los inconversos del mundo, o por lo menos su tema.  Se oye decir a menudo “era un David contra Goliat” hablando de varios temas incluyendo la competencia entre una compañía pequeña contra una grande.  Pero está lleno de instrucción por nosotros porque vemos aquí en David una bendita ilustración de nuestro Señor Jesucristo, matando o anulando a Satanás con su propia espada, o sea, por medio de la muerte.  “Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo…” Hebreos 2:14 También leemos “Porque aunque fue crucificado en debilidad, vive por el poder de Dios.”  2 Corintios 13:4

 

Pero antes de hablar de David, pensamos un poco del rey actual, de Saúl.  Nos acordamos de su parecer cuando fue escogido por el pueblo.  “Entre los hijos de Israel no había otro más hermoso que él; de hombros arriba sobrepasaba a cualquiera del pueblo.”  1 Samuel 9:2 Así el hombre que debería haber salido contra Goliat era el mismo Saúl.  Pero no le encontramos con valentía para pelear.  “Oyendo Saúl y todo Israel estas palabras del filisteo, se turbaron y tuvieron gran miedo.”  Tampoco vemos a Jonatán, su hijo que antes había salido con su paje de armas contra un grupo de filisteos con mucha valentía, pero aquí no había la fe tampoco con Jonatán para salir.  Eso no nos hace dudar la fe de Jonatán, pero en Saúl vemos como el hombre según la carne no puede contra las asechanzas de Satanás.  ¿Qué nos enseña Efesios 6?  “Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo.”  Saúl quiso compartir su armadura a David; si no servía para Saúl, ¿cómo iba a servir a David? No, con esto David no iba a salir sino con las armas que había probado en la presencia de Jehová. 

 

Quiero considerar también en este estudio algo muy importante acerca del prototipo bendito de David como hijo del padre, enviado de su padre a sus hermanos.  Recordamos de otro prototipo que hemos estudiado, el mismo José.  “Después fueron sus hermanos a apacentar las ovejas de su padre en Siquem.  Y dijo Israel a José: Tus hermanos apacientan las ovejas en Siquem: ven, y te enviaré a ellos. Y él respondió: Heme aquí.”  Génesis 37:12-13 También escuchamos la voz del profeta Isaías “Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí.”  Isaías 6:8 Otra vez vemos en Hebreos 10:5-7 “Sacrificio y ofrenda no quisiste; Mas me preparaste cuerpo. Holocaustos y expiaciones por el pecado no te agradaron. Entonces dije: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad, como en el rollo del libro está escrito de mí.”  En nuestro capítulo vemos lo mismo en su prototipo; “Y dijo Isaí a David su hijo: Toma ahora para tus hermanos un efa de este grano tostado, y estos diez panes, y llévalo pronto al campamento a tus hermanos. Y estos diez quesos de leche los llevarás al jefe de los mil; y mira si tus hermanos están buenos, y toma prendas de ellos.”

 

¿No nos hace pensar de las palabras de 1 Juan 4:9-10?  “En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él. En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.”  Mis amados hermanos, hay algunos que niegas que Cristo era siempre hijo de Dios; enseñan más bien que llegó a ser Hijo cuando nació en Belén de la virgen María.  Pero si eso fuera cierto, hubiera tenido que decir el Espíritu de Dios en 1 Juan 4 que Dios envió al que llegó a ser su Hijo. Pero no, como vemos en los prototipos que lo precioso de considerar en el regalo de Dios a este mundo es eso, que envió a su hijo eterno.  “En esto consiste el amor”.  Leemos de José “Y amaba Israel a José más que a todos sus hijos, porque lo había tenido en su vejez; y le hizo una túnica de diversos colores.”  Así el amor del Padre al Hijo da valor al sacrificio que hizo Dios.  La túnica nos hace pensar la gloria del Señor Jesús, cual gloria el mundo intentaba quitarle, pero no fue posible.  “Y desnudándole, le echaron encima un manto de escarlata, y pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas, y una caña en su mano derecha; e hincando la rodilla delante de él, le escarnecían, diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos! Y escupiéndole, tomaban la caña y le golpeaban en la cabeza.”  Mateo 27:28-30 ¡Bendito Señor Jesús!  ¡Hijo eterno del padre!  ¡Nos arrodillemos delante de ti en adoración por tu persona, Hijo eterno del Padre!

F. Fournier